La caída de
la civilización occidental dominada por los luciferinos es un paso altamente
perturbador pero NECESARIO para el progreso humano: la vida, la libertad y la
libertad penden de un hilo.
La situación
actual revela una verdad asombrosa: casi todas las instituciones de la
civilización occidental moderna están frenando a la humanidad del progreso, la
verdad, la libertad y la felicidad. Casi sin excepción, todas las
instituciones occidentales (gobierno, medios, entretenimiento, deportes,
educación, finanzas, tecnología, ciencia, medicina y más) han sido superadas
por fuerzas luciferinas antihumanas que impulsan políticas arraigadas en pura
maldad: